Septiembre de 1997. Son las tres de la tarde, un día antes de mi cumpleaños. Mientras espero el ascensor para subir a casa, con dos bolsas llenas de comida, que he dejado en el suelo para darme un respiro, me da por tocarme las tetas y noto...
Los poemas que conforman 'Los pecios del naufragio', dispersos y derrotados, esperaban su turno en los cajones de mi escritorio, abrazados y defendidos por tantas notas y textos sueltos que se habían rezagado, sepultados por el tumulto,...