El gato que regaló sus vidas

Una fábula conmovedora sobre lo que de verdad importa. Escrita con un nivel que rara vez se encuentra en la literatura infantil. Tal vez porque la autora no lo ha escrito únicamente para disfrute de los niños.

¡Qué maravilla! Acabo de terminar de leerlo con mi hija de nueve años y sólo puedo decir GRACIAS a la autora por una historia tan entrañable, tan bien escrita y tan llena de los valores que de verdad importan. Personalmente creo que últimamente estamos dando a leer a los niños demasiadas historias de súper héroes, magos y brujitas y no tengo nada en contra, pero me da pena que se pierdan una joya como ésta que te anima a hacer lo que esté en tu mano para ayudar al que tengas al lado desde la empatía, la generosidad y la compasión. Altruismo para combatir el egoísmo que cada vez parece ir a más... No es que recomiende esta historia, es que debería ser de "obligada" lectura. Y una última recomendación: no se la dejéis a vuestros hijos sin más. Leedla vosotros también, con ellos o a solas, porque no os dejara indiferentes.

Un cuento entrañable para niños y enternecedor para adultos sobre la felicidad de compartir la vida en general, entendida como lo más valioso que hay que cuidar, y cómo esa ofrenda (regalar tiempo, acompañar, actos de bondad) hace que un corazón se engrandezca. Una narración sobre aquello que nos aportamos unos a otros en cada encuentro para despertarnos a la belleza, la libertad, la justicia, mientras aprendemos a ser más generosos y compasivos, mientras aprendemos a ser más nosotros mismos. Escrito con un ritmo equilibrado y diálogos que hacen esbozar un sonrisa, es una historia que engancha fácilmente desde el principio sobre los vínculos que establecemos para abordar la unicidad de cada ser y la consciencia de que todos tenemos un propósito y una función en este mundo. Sin olvidar la capacidad de atreverse a soñar, de levantarse y seguir adonde te lleve el camino.