El extranjero

Siento un amor-odio. En partes enganchaba y en otras aburría.

"El extranjero" es una novela escrita por Albert Camus que capturó mi atención de principio a fin con su estilo narrativo cautivador y la forma en que relata las acciones de su protagonista. La historia se desenvuelve en torno a Meursault, un hombre aparentemente indiferente y distante hacia las convenciones sociales y las emociones humanas. La narración de Camus es directa y despojada de artificios, lo que refuerza la personalidad intrigante de Meursault. A través de su prosa precisa, el autor logra transmitir la sensación de que estamos presenciando los eventos en tiempo real, sumergiéndonos en la mente de Meursault y sus acciones aparentemente inexplicables. Lo interesante de la narración radica en cómo Camus explora la alienación existencial y la absurda naturaleza de la vida a través de las acciones del protagonista. La falta de emociones convencionales de Meursault, su falta de apego y su indiferencia ante situaciones socialmente esperadas, provocan una reflexión profunda sobre la condición humana y las convenciones que nos rodean. A medida que avanza la historia, la narración de Camus se intensifica, llevándonos a un clímax inesperado y confrontándonos con las consecuencias de las acciones de Meursault. La forma en que el autor presenta la historia nos hace cuestionar nuestras propias convicciones y nos invita a reflexionar sobre el sentido de la existencia. En resumen, la narración de Camus en "El extranjero" es fascinante en su sencillez y capacidad para capturar la esencia de la alienación y la absurdidad humana. A través de las acciones de Meursault, el autor nos invita a explorar nuestra propia relación con el mundo y nos desafía a reflexionar sobre las convenciones sociales y las emociones que dan sentido a nuestras vidas.