De la mano de uno de los ilustradores más reconocidos de Francia, una fábula cargada de humor que nos recuerda la importancia de aceptarnos como somos.
Cuando sea mayor, me saldrán pelos en las axilas, y podré decir palabrotas y tener novia. Pero también tendré que ir a trabajar, usaré gafas y perderé los dientes.
Soy muy goloso. y muy, muy torpe. Siempre grito y no me gusta nada lavarme. Pego los mocos por todas partes y hoy he cortado las cortinas de mi habitación. Y, sin embargo. ¡mi mamá me adora!